Daniel Prassel: "Veo un escenario equilibrado pero estoy preocupado por los dichos en campaña"

 



El integrante de la Mesa del Ex Pozo de Banfield, Daniel Prassel, llama a estar alertas por algunas declaraciones y redobla su apuesta en materia de Derechos Humanos. 

Por Diego Villarino

Daniel Prassel integra la Mesa del Ex Pozo de Banfield, un Espacio de la Memoria ubicado en Luis Siciliano 1773, Banfield. Durante la Dictadura Cívico Militar funcionó como un Centro Clandestino donde se practicó tortura sistemática y violencia sexual. Hoy es reconvertido en un espacio con múltiples actividades, todas destinadas a recrear y concientizar.

"Nunca debemos permitir que se hable de un genocidio, como si eso fuera un exceso o un se le fue la mano", asevera con contundencia Prassel. Mientras toma un café, hace un paneo del panorama político, los Derechos Humanos, Milei, la actualidad del Municipio vecino de Lanús y la organización del movimiento peronista.


-¿Cómo analizás el escenario político actual?

-El compañero Axel Kicillof fue reelegido en provincia y ganamos varias intendencias del Conurbano. Veo un escenario equilibrado pero estoy preocupado por los dichos en campaña. Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza no tuvieron contemplaciones en desmentir la cantidad de desaparecidos, en negar el uso indiscriminado de la Fuerza en la dictadura. Nunca debemos permitir que se hable de un genocidio, como si eso fuera un exceso o un se le fue la mano, como han dicho en campaña. Milei utilizaba en campaña las mismas expresiones de los que sí torturaron, violaron, robaron niños y tiraron personas vivas desde los aviones al Rio de La Plata. Usó las mismas palabras que Emilio Massera. Eso sumado a una candidata a vicepresidente como Victoria Villarruel, que es un personaje que conocemos desde hace bastante tiempo. De mínima nos mantiene preocupados y atentos a cualquier movimiento relacionado a  la temática, para no distraernos y poder poner los frenos que sean necesarios cuando quieran avanzar o avasallarse.

-¿Cual es al importancia de mantener ese equilibrio?

-El sábado, en el discurso de asunción, Fede fue muy claro en relación a la Memoria, la Verdad y la Justicia. Le dijo al pueblo lomense que él es un hijo de la democracia, que nació en 1984 y dejó en claro que Lomas no va a bajar la bandera  de Memoria, Verdad y Memoria, y por supuesto seguirá acompañada de políticas publicas que tengan que ver con la promoción y difusión de los derechos humanos, como se viene haciendo, pero de una manera más focalizada y comprometida. Creemos en la educación, en la capacitación y en la transmisión de la memoria histórica y del pasado reciente, con todos los mecanismos pedagógicos, institucionales y educativos que tengamos a mano. Por ejemplo: las visitas guiadas a los Espacios de la Memoria, las capacitaciones para los trabajadores y trabajadoras en materias de Derechos Humanos, los altos institucionales por el 24 de marzo, el 16 de septiembre y 10 de diciembre. El gobernador y los intendentes peronistas se van a abroquelar en la idea de que el consenso democrático es lo más importante en estos 40 años".

- En las últimas elecciones, el peronismo recuperó Lanús ¿Qué valor le das al triunfo de Julián Álvarez?

La recuperación de Lanús fue importantísima, porque es un municipio históricamente justicialista. Le tocó pasar 8 años de abandono con la gestión un Grindetti que ni siquiera vivía en el distrito y le faltó el respeto a la gente yéndose a Independiente. Julián Álvarez tiene el desafío de volver a encarrilar el distrito con la lógica de Avellaneda, Lomas y Brown. En ochos años, Lanús no tuvo políticas publicas  de Derechos Humanos. solo se hicieron iniciativas sostenidas por la Universidad Nacional de Lanús o por el Club Atlético Lanús con la subcomisión de socios que activa la memoria o por los organismos y asociaciones militantes, como HIJOS y la Mesa de la Memoria, que en Lanús, sostuvieron esta bandera en soledad. Nunca existió una respuesta institucional. Un proyecto de pais piensa los Derechos Humanos como algo fundamental y constitutivo de la democracia y otro sector le baja el precio. Hablar de Derechos Humanos significa revalorizar el trabajo, la salud, la educación, el ambiente, la soberanía y la memoria en otros temas.

- Macri habló en algún momento del curro de los Derechos Humanos ¿Pensás que habrá similitudes con el gobierno del ex presidente?

-La similitud va tener que ver con la permanente agresión a toda la política pública de Derechos Humanos. Esto se traduce en despidos de trabajadores y trabajadoras de los lugares donde se construye la Memoria. Después va a haber un fuerte ataque mediático hacia todo lo que tiene que ver con la recuperación de la democracia. Va a haber desfinanciamiento de los espacios de Memoria y seguramente alguna gestualidad desde lo institucional, poniendo la causa en un segundo y tercer orden. Por supuesto que grupos minúsculos van a generar vandalismo en señalizaciones, monumentos y huellas urbanas que construye el pueblo y sus representaciones. Además, no descarto que piensen en ralentizar los juicios de lesa humanidad para garantizar la impunidad biológica de los genocidas y que al mismo tiempo, si tienen posibilidades, den el beneficio de la domiciliaria.

                 

-Milei recibió el apoyo de una parte de la juventud. ¿Cómo se llega a los jóvenes?

-Primero hay que escuchar mucho a la juventud porque a veces con nuestro propio mensajes tapamos otros mensajes.  Nos tiene que hacer reflexionar, que por ahí a muchos jóvenes no les estamos dando respuesta en sus lógicas y validas demandas. Si te están dando un mensaje electoral, quiere decir que hay una respuesta que no esta llegando.

Al mismo tiempo, a 40 años de democracia, nos exige que seamos capaces de generar un discurso más cercanos, para poder interpelarlos. Con una canción, un programa de TV o de radio, con una acción ambiental establecemos un diálogo directo. Hay que invitarlos a conocer los Espacios de Memoria y motivarlos a generar iniciativas, capacitar al pueblo en materia de Derechos Humanos.

-¿Pensas que lo urgente tapó otras causas?

-Lo urgente siempre se impone. Hay que pensar un país para todos y todas, donde entre el 80% del pueblo. El voto de Milei fue heterogéneo, hay muchos votantes que no están de acuerdo con la dictadura. No creo que el 100% sea negacionista o reivindique al dictadura.

-¿Crees que entre Juntos por el Cambio y La Libertad Avanza hubo una interna electoral?

-Sí, la interna entre ellos influyó en el resultado final. Los 40 años de democracia nos hace celebrar pero también debemos reflexionar las deudas pendientes. Para la derecha, la Elección General terminó siendo una PASO, y después no tienen drama en abrazarse a la hora de los bifes. La fuerza mayoritaria cuando se impone, se queda sin margen de alianza posible a la hora de enfrentar el balotaje. Hay algo que no funciona. La mejor manera es volver a un esquema de internas partidarias. El votante genuino de Milei no debe estar cómodo con la situación, votó otra cosa.

-Algún mensaje sobre los Derechos Humanos

-Vienen tiempos duros, donde vamos a tener que apostar mucho a la organización y defender lo conseguido sin permitir retrocesos, que nos van a tratar de imponer y sin permitir provocaciones. A Estela (De Carlotto) se le dijo en campaña que es una persona siniestra. No se puede permitir que sea agraviada de esa manera. Es una de las tres personas más importantes en materia de Derechos Humanos. Nos van a encontrar en la calle, en los lugares de lucha. No vamos a permitir que los dirigentes de La Libertad Avanza vayan al Ex Pozo a sacarse una foto para tratar de lavarse la cara. Acá lo único que se necesita es un perdón público.

-¿Cómo la notás a Estela de Carlotto?

-La veo con pilas y comprometida como nunca, muy certera. Ya le pidió una audiencia al presidente y espero que sean recibida prontamente. Ahí Milei va a tener que retroceder. Ese gesto haría mella en su base de sustentación. Justamente nadie recibiría a personas que supuestamente mienten. Como lo marcó Cristina, de manera distendida recibió a Villarruel y bromeó con Milei. Demostró que la democracia es más importante que una rivalidad política. Es el derecho a la paz más allá de los dramas y deudas pendientes. Hay que hacer los esfuerzos necesarios para que no haya retrocesos, sin bajar ninguna bandera, siempre con Memoria, Verdad y Justicia, no repetición y reparación.




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